Roman Honet

1974 -, Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

CLASES DE ALQUIMIA NOCTURNA

he fundido el negro de cada ornamento
eso es posible, la humedad que forma bultos autótrofos
en los vestíbulos de los baños, lavazas en las que devino
el tiempo de los males irrecuperables o de las vacaciones. aún
estás ahí, entre las zarzas junto al río
aún brilla tu equipaje,
una sombra —estatua portátil de la sangre—. pienso:
verano que mueve los relojes en los trigales,
bosque subtropical, nunca
jamás te encontraré. oh chispa. oh ironía.
d/retenida en mí para siempre,
cada noche muerta de una forma distinta

RODZAJE NOCNEJ ALCHEMII

z każdej ozdoby wytopiłem czerń,
to jest możliwe, wilgoć tworząca samożywne bryły
w przedsionkach łaźni, pomyje, w które zmienił się
czas bezpowrotnych chorób czy wakacji. jeszcze
tam stoisz, w krzewach ostrężyn przy rzece
błyszczy się jeszcze twój bagaż,
cień — przenośny posąg krwi. myślę:
lato przesuwające zegary w zbożu,
subtropikalny las, nigdy cię
nie spotkam. iskro. ironio.
zatrzymana we mnie na zawsze,
każdej nocy martwa inaczej

Ryszard Krynicki

1943 – , Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

***

auroras, albas, signos secretos,
un viaje como lectura de un libro en lengua extranjera
sobre lugares conocidos
en una página sin número del mundo despierto en un sueño sin sueños
leo este viaje desde el final en un idioma desconocido

de Acta de nacimiento (1969)

Video propio

***

zorze, świty, tajemne znaki,
podróż jak czytanie obcojęzycznej książki
o znanych miejscach,
na nieliczbowanej stronie świata zbudzony w bezsennym śnie
Czytam tę podróż od końca w nieznanym języku

z Akt urodzenia (1969)

Adam Górski

1976 – , Polonia (Cracovia)

Trad. Ada Trzeciakowska

***

el pájaro
encerrado en la cabeza de un hombre
atrapado en su propio cerebro
el pájaro alimentado por una familia atenta
a través de una ventana sin tapar
con la pulpa de los afectos necesarios
cuando se posa
suele haber luz en el exterior
pero ahora se extiende la noche cuyo color
es indescriptible
que ilumina el árbol y las estrellas
que trae alegría al hombre
que alimenta con una especie de éxtasis
a los dos

William Kentridge

***

ptak
zamknięty w głowie człowieka
uwięzionego we własnym mózgu
ptak karmiony przez troskliwą rodzinę
przez jedno odsłonięte okno
miąższem koniecznych uczuć
kiedy siada
na zewnątrz jest zwykle widno
ale teraz jest noc której koloru
nie da się opisać
która oświetla drzewo i gwiazdy,
która przynosi człowiekowi radość
która karmi rodzajem ekstazy
ich obu

Z tomiku Ślady. Kroki (2016)

Julian Kornhauser

1946, Polonia

Faena

Quería ser poeta
se puso a escribir

pero las palabras que componía
no significaban nada

no lograban encadenarse
revoloteaban torpemente
sus alas

las modificó algunas veces
creyendo que lo conseguiría

ignorando, sin embargo
que debía olvidarse por un tiempo
de sí mismo

que era necesario inventar un lenguaje
que lo derrotara

irrevocablemente

Fotograma de Winter Sleep de Nuri Bilge Ceylan

Trud

Chciał zostać poetą
zabrał się do pisania

słowa które układał
nic jednak nie znaczyły

nie umiały się związać
trzepotały nieporadnie
skrzydłami

kilkakrotnie je zmieniał
wierząc że mu się uda

nie wiedział jednak
że musi zapomnieć na chwilę
o sobie

że musi wymyślić język
który by go pokonał

nieodwołalnie

Adam Górski

1976 – , Polonia (Cracovia)

Trad. Ada Trzeciakowska

IX

Todas las palabras que dan la talla
Al vestido que una ráfaga despega del cuerpo
Mueren felizmente.
Este retazo de lino marca
edificios que se sumergen en el olvido acuoso
(donde un viejo echa un gran barco de madera)
Tanto más que, junto al monasterio, alguien toca mal
 el violín
 Y dentro, en los micrófonos se oyen ásperos coros –
– alternativamente.
En la luz en la cual se refleja y se descama
Todo lo que no soy
Precipitándose al agua en saltos desiguales,
pierde la memoria el edificio de la escuela,
Perturbados pasillos, interrogantes y austeras puertas –
– una a una
El miedo se encierra y descolora en acuarios sombríos,
detrás de ellos el viejo profesor mueve los labios.

Collage propio

IX

Wszystkie wyrazy, które dają miarę
Odstającej w podmuchu od ciała sukience
Szczęśliwie giną.
Ten kawałek płótna znaczy
Kilka budynków schodzących w wodny niebyt
(gdzie stary mężczyzna puszcza duży drewniany statek)
Tym bardziej, że obok klasztoru ktoś źle gra na
 skrzypcach
 A w środku, w mikrofonach słychać chropowate chóry –
– na przemian.
W świetle, w którym odbija się i łuszczy
Wszystko, czym nie jestem,
wstępującym do wody w nierównych skokach,
Traci pamięć budynek szkoły,
Głuchnące korytarze, pytające i surowe drzwi –
– jedne po drugich
Strach zamyka się i blaknie w ciemnych akwariach,
Za którymi porusza wargami stary nauczyciel.

Z tomiku Stygnące litery (2014)

Tomasz Różycki

1970 – , Polonia

Recientemente galardonado con El Premio Wisława Szymborska al mejor libro de poesía publicado en 2022.

Trad. Ada Trzeciakowska

ZENTRALER OMNIBUSBANHOF

Se te parte el corazón. En un momento
el autobús arranca y tú giras la cabeza
para que no puedan ver cómo
los rasgos de tu rostro se hunden en la ruina.

Ya se podrá reparar. Dentro sólo caerán
más y más cristales del mundo
y de la sal gruesa. De hecho, cabrá allí
todo aquel mundo junto con sus afueras

y los autobuses con sus horarios
e impreso en las arrugas alrededor de los ojos
un intrincado mapa de conexiones. Y en cada
uno de ellos te marcharás. Pero de eso no quería

hablar, no. Simplemente se te parte el corazón.
Y nada, nada. Nada más.

de La mano del apicultor, 2022

ZENTRALER OMNIBUSBANHOF

Po prostu pęka ci serce. Za chwilę
autobus rusza, a ty się odwracasz,
żeby nie było widać, jak się właśnie
rysy twej twarzy osuną w ruinę.

Już się nie poskleja. Będą tam wpadać
tylko coraz nowe kryształy świata
i grubej soli. Właściwie to zmieści
się tam cały ów świat razem z przedmieściem

i autobusy z ich rozkładem jazdy
i z wdrukowaną w zmarszczki wkoło oczu
misterną mapą połączeń. A w każdym
z nich ty odjeżdżasz. Ale ja nie o tym

chciałem, nie. Po prostu pęka ci serce.
I nic, nic. Nic więcej

z Ręka pszczelarza, 2022

Zbigniew Herbert

1924-1998, Polonia

28 de julio se cumplieron 25 años de la muerte de Zbigniew Herbert.

FOTOGRAFÍA*

Con ese muchacho inmóvil como la flecha del eleata
muchacho entre hierbas altas nada tengo en común
salvo la fecha de nacimiento las rayas de la mano

la fotografía la tomó mi padre antes de la segunda guerra médica
del follaje y las nubes deduzco que era agosto
los pájaros resonaban los grillos el olor de cereales olor de plenitud

abajo el río en los mapas romanos llamado Hípanis
la cuenca fluvial y el cercano trueno aconsejaban refugiarse entre los griegos
sus colonias en la costa no quedaban demasiado lejos

el muchacho sonríe confiado la única sombra que conoce
es la sombra del sombrero de paja la sombra del pino la sombra de la casa

y aquí el único resplandor es el resplandor del poniente

        pequeño mío mi Isaac agacha la cabeza
        solo un instante de dolor y después serás
        lo que quieras – golondrina lirio silvestre

        debo pues verter tu sangre pequeño mío
        para que inocente quedes en el relámpago estivo
        ya para siempre seguro como un insecto preso en el ámbar
        bello como una catedral de helechos en el carbón salvada

*El poema es una pregunta de índole religiosa dirigida a Dios, cuya voluntad no sólo es fuente de poder curativo, sino que también puede inspirar terror y miedo. El único y esperado hijo de Abraham, Isaac, debía, según el mandato de Yahvé, ser asesinado por su propio padre y sacrificado en el monte Moriah (…). La historia de Abraham e Isaac en el Antiguo Testamento fue objeto de un minucioso análisis por parte de Søren Kierkegaard en su libro. En él, el filósofo danés ve la paradoja de la fe condicionada por la suspensión teleológica de la ética. La ética no tiene finalidad fuera de sí misma, porque ella misma es un τέλος para todo. Abraham se enfrenta a Dios completamente solo, en una relación definida por Kierkegaard como absoluta. No puede apelar a la ética, cuyos principios son generales y, por tanto, universalmente válidos para todos. El asesinato de su amado hijo, después de todo, es incompatible con la ética. De ahí la profunda soledad de Abraham. El camino hacia el monte Moriah debió de ser un calvario para él, porque –tras haber transgredido los límites éticos- se quedó completamente solo con Isaac y con su fe. La paradoja, pues, es que el individuo, en un acto de fe, trasciende la ética, es decir, lo que es general y universal.
Las dos últimas estrofas del poema «Fotografía» de Herbert son una referencia evidente a la historia de Abraham e Isaac. Al igual que Kierkegaard, el poeta pone en boca del padre las palabras con las que podría haberse dirigido a su hijo cuando ambos se encontraban en el monte Moriah. En el Génesis, a la pregunta de Isaac por el animal para el sacrificio, Abraham responde: «Dios proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío». (Génesis 22:8), y oculta así al muchacho la tragedia y el horror del acontecimiento hasta el último momento. (…) El tiempo histórico se transforma en el eterno ahora, ya que Isaac, asesinado por su padre, es comparado con un insecto en ámbar y con una catedral de helechos salvada en carbón. (…) La muerte de Isaac en el poema de Herbert es así una necesidad sufragada con el sufrimiento del niño, que es la condición sine qua non de su existencia fuera del tiempo (…).
El tiempo histórico, el tiempo de la aniquilación de la guerra, se cruza así en el poema «Fotografía» con el tiempo eterno. El niño es inmortalizado en la fotografía, inmóvil como la flecha de eleata, y por tanto (según la paradoja de Zenón de Elea) permanece en la inmovilidad (el movimiento de la flecha es una apariencia), (…). El movimiento existe, sin embargo, en el sentido de un cambio cualitativo aristotélico, ya que el muchacho, como el grano que madura, pronto tendrá que dar fruto, que es la aceptación de su propio destino. (…)
El sujeto enunciador lírico contempla la historia del muchacho de la fotografía desde una perspectiva posfáctica; las mismas huellas dactilares señalan la identidad de la persona, aunque los separa el abismo del tiempo. La fotografía fue tomada antes de la Segunda Guerra Mundial (del follaje y las nubes deduzco que era agosto), cuando el niño aún no había conocido el horror de la destrucción y la muerte; sin embargo, tanto el olor de cereal como el resplandor del poniente presagian la consumación del sacrificio; el resplandor del fuego y la mies madura para la siega. El orador tiende un puente temporal entre la historia contemporánea y la historia de Abraham e Isaac. La muerte del muchacho sería, pues, el cumplimiento del destino asignado por Dios, quien, sin embargo, le llama a la vida en la intemporalidad, es decir, en el eterno ahora (…). La pregunta a Dios está implícita y se refiere a la cuestión de preservar la fe ante la muerte de un niño inocente. Sin embargo, la diferencia es fundamental, porque en la Biblia es Abraham quien ha de ser el artífice de la acción, lo que significa que su fe (como padre del niño) es sometida a la prueba suprema, mientras que en la obra de Herbert el niño es víctima de la guerra. Para Hegel, la historia (y por tanto la guerra) era una necesidad a través de la cual el espíritu absoluto adquiría conciencia de sí mismo. El individuo, en cambio, sólo podía realizarse en la generalidad ética y en la comunidad, tesis inaceptable para Kierkegaard, que creía que la fe era la relación fundamental entre Dios y el individuo (no vinculada a ninguna generalidad como la ética hegeliana o el espíritu de la historia). En el poema de Herbert, la luminosidad del ámbar perdurable –hashmal*– representa una negación de la sombra asociada al tiempo histórico del Holocausto. Dios, como administrador del destino en nombre de la necesidad histórica, no le era próximo. Siguiendo a Kierkegaard, Herbert muestra la paradoja y el poder de la fe de Abraham, que trasciende la ética y lo general para cumplir la voluntad de Yahvé.

HALINA KOZDĘBA-MURRAY «Motivos filosóficos en la obra de Zbigniew Herbert»
*ámbar, pero también ángel, una entidad luminosa, eléctrica

Fotografía de Chevalier Bernard

FOTOGRAFia*

Z tym chłopcem nieruchomym jak strzała Eleaty
chłopcem wśród traw wysokich nie mam nic wspólnego
poza datą narodzin linią papilarną

to zdjęcie robił mój ojciec przed drugą wojną perską
z listowia i obłoków wnioskuję że był sierpień
ptaki dzwoniły świerszcze zapach zbóż zapach pełni

w dole rzeka na rzymskich mapach nazwana Hypanis
dział wód i bliski grom doradzał by schronić się u Greków
ich nadmorskie kolonie nie były zbyt daleko

chłopiec uśmiecha się ufnie jedyny cień jaki zna
to cień słomkowego kapelusza cień sosny cień domu
a jeśli łuna to łuna zachodu

        mój mały mój Izaaku pochyl głowę
        to tylko chwila bólu a potem będziesz
        czym tylko chcesz – jaskółką lilią polną

        więc muszę przelać twoją krew mój mały
        abyś pozostał niewinny w letniej błyskawicy
        już na zawsze bezpieczny jak owad w bursztynie
        piękny jak ocalała w węglu katedra paproci

*Wiersz jest pytaniem natury religijnej skierowanym do Boga, którego wola jest nie tylko źródłem ozdrowieńczej siły, lecz może także budzić grozę i lęk. Jedyny i długo oczekiwany syn Abrahama – Izaak, zgodnie z nakazem Jahwe miał zostać zamordowany przez własnego ojca i złożony w ofierze na górze Moria (…). Starotestamentowa historia Abrahama i Izaaka stała się przedmiotem gruntownej analizy Sørena Kierkegaarda w jego książce „Bojaźń i drżenie”. Duński filozof dostrzega w niej paradoks wiary, którego warunkiem jest teleologiczne zawieszenie etyki. Etyka nie ma żadnego celu poza sobą, ponieważ sama stanowi τέλος dla wszystkiego. Abraham staje wobec Boga zupełnie sam, w stosunku określonym przez Kierkegaarda jako absolutny. Nie może odwołać się do etyki, której zasady są ogólne, a tym samym powszechnie ważne dla wszystkich. Zamordowanie ukochanego syna pozostaje przecież w sprzeczności do etyki. Stąd dogłębna samotność Abrahama. Ścieżka wzwyż ku górze Moria musiała być dla niego męką, ponieważ – przekroczywszy granice etyczne – pozostał zupełnie sam z Izaakiem i ze swoją wiarą. Paradoks polega więc na tym, że jednostka w akcie wiary transcenduje etykę, a więc to, co ogólne i uniwersalne.
Ostatnie dwie strofy w wierszu Herberta „Fotografia” są oczywistym nawiązaniem do historii Abrahama i Izaaka. Podobnie jak Kierkegaard, poeta wkłada w usta ojca słowa, którymi mógł zwrócić się do syna, gdy obaj stanęli już na górze Moria. W Księdze Rodzaju, na pytanie Izaaka o zwierzę ofiarne, Abraham odpowiada: „Bóg upatrzy sobie jagnię na całopalenie, synu mój.” (Rdz 22, 8), a zatem do ostatniej chwili ukrywa przed chłopcem tragizm i grozę wydarzenia. (…) Czas historyczny zamienia się w wieczne teraz, ponieważ zamordowany przez ojca Izaak porównany zostaje do owadu w bursztynie i do ocalałej w węglu katedry paproci. (…) Śmierć Izaaka w wierszu Herberta jest więc koniecznością okupioną cierpieniem chłopca, które stanowi warunek sine qua non jego trwania poza czasem (…) .
Czas historyczny, czas wojennej zagłady przecina się zatem w wierszu „Fotografia” z czasem wiecznym. Chłopiec jest uwieczniony na zdjęciu, nieruchomy jak strzała Eleaty, a więc (zgodnie z paradoksem Zenona z Elei) pozostający w bezruchu (ruch strzały jest pozorem), (…). Ruch istnieje jednak w znaczeniu arystotelesowskiej zmiany jakościowej, ponieważ chłopiec, podobnie jak dojrzewające zboże, będzie musiał w niedługim czasie wydać plon, którym jest przyjęcie własnego losu. Także lilia, której kształt po śmierci miałby przybrać Izaak, odsyła do symboliki biblijnej, wskazując na niewinność chłopca, oraz jego królewską godność: „nawet Salomon w całym swoim przepychu nie był tak ubrany jak jedna z lilii polnych.”
Osoba mówiąca w wierszu rozpatruje historię chłopca z fotografii z perspektywy post factum; te same linie papilarne wskazują na tożsamość osoby, jakkolwiek dzieli je otchłań czasu. Zdjęcie powstało przed II wojną światową (z listowia i obłoków wnioskuję, że był sierpień), gdy chłopiec nie znał jeszcze grozy zniszczenia i śmierci, a jednak tak zapach zbóż, jak i łuna zachodu są zapowiedzią dopełnienia ofiary; łuny pożaru i dojrzałego do zbioru żniwa. Osoba mówiąca tworzy pomost czasu między historią współczesną, a historią Abrahama i Izaaka. Śmierć chłopca byłaby zatem spełnieniem losu przeznaczonego mu przez Boga, który jednak powołuje go do życia w bezczasowości tj. w wiecznym teraz (…). Pytanie do Boga jest ukryte i dotyczy kwestii zachowania wiary w obliczu śmierci niewinnego dziecka. Różnica jest jednak zasadnicza, ponieważ w Biblii to Abraham ma być sprawcą czynu, co oznacza, że jego wiara (jako ojca dziecka) zostaje wystawiona na najwyższą próbę, podczas, gdy w utworze Herberta chłopiec jest ofiarą wojny. Dla Hegla historia (a więc także wojna) była koniecznością, dzięki której duch absolutny zyskiwał samoświadomość. Jednostka mogła natomiast uzyskać spełnienie tylko w ogólności etycznej i we wspólnocie – teza niemożliwa do przyjęcia dla Kierkegaarda, który uważał, że wiara jest fundamentalną relacją między Bogiem i jednostką (nie wiąże się z żadną ogólnością np. etyką heglowską, czy duchem dziejów). W wierszu Herberta świetlistość trwałego bursztynu haszmal stanowi zaprzeczenie cienia związanego z historycznym czasem Zagłady. Bóg, jako szafarz losu w imię konieczności historycznej nie był mu bliski. Idąc za Kierkegaardem Herbert ukazuje paradoks i siłę wiary Abrahama, który przekracza etykę i to, co ogólne, by spełnić wolę Jahwe.

HALINA KOZDĘBA-MURRAY «Wątki filozoficzne w twórczości Zbigniewa Herberta»

Adam Górski

1976 – , Polonia (Cracovia)

Trad. Ada Trzeciakowska

Escucha

Escucha esta frase
por primera vez siento
cómo late el corazón ajeno,
y se abren los nombres que nos han dado
(como el árbol el viento)
y a millones de kilómetros de aquí está el aire
que respiro.
Deja, pues, que florezca la flor
que se aferra con tanta fuerza a la tierra,
y luces multiplicadas,
vidrios del pasillo
voces infantiles en esfera del metro carteles
espejos sucios
deja que se desprendan
de tu mano.
En el fondo de los ojos apretados
en el patio del hospital,
junto al árbol del conocimiento
duerme un punto
de arena amarilla
(palabra congelada
sin canto de hierba
en tu pelo).
Escucha esta frase
por primera vez siento
cómo late el corazón ajeno.

De Anotaciones a miradas apartadas (2022)

Fotogramas de Una vida oculta (2019) de Terrence Malick

Posłuchaj

Posłuchaj tego zdania
pierwszy raz czuję
jak bije czyjeś serce,
i otwierają się nadane nam imiona
(takie jak drzewo wiatr),
a miliony kilometrów stąd jest powietrze
którym oddycham.
Niech więc kwitnie kwiat,
który przywiera tak silnie do ziemi,
a pomnożone światła,
szkła w korytarzu
głosy dzieci w kuli metra plakaty
brudne lustra
niech odrywają się
od twojej ręki.
Na dnie ściśniętych oczu,
na dziedzińcu szpitala,
obok drzewa wiadomości
śpi kropka
żółtego piasku
(zamarznięte słowo
bez śpiewu traw
w twoich włosach).
Posłuchaj tego zdania
pierwszy raz czuję
jak bije czyjeś serce.

Z tomiku Notatki do odwróconych spojrzeń (2022)

Adam Zagajewski

1945 – 2021 , Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

De los recuerdos

Estábamos vivos. Nos observaban con envidia
los ojos de las lagartijas soñolientas, las hojas
de los olmos pardos, como extrañándose
de que tal exceso de vida fuese aún
posible y no se desbordase hacia el aniquilamiento.

Fotografías de Sally Mann (1951, Estados Unidos)

Ze wspomnień

Żyliśmy. Zazdrośnie na nas patrzyły
oczy sennych jaszczurek, liście
wiązów brązowych, jakby dziwiąc się,
że taki nadmiar życia jest jeszcze
możliwy i nie przelewa się ku zagładzie.

Roman Honet

1974 -, Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

sobre lo que hemos perdido

y después por la noche recordé,
cómo nos iban las cosas, cuando gritabas en sueños: cairo, cairo,
pero yo no te oía en absoluto,

y nuestras manos a través del temblor de la hierba
no se abrieron paso jamás. Y estaba dios,
noté su presencia en el lago,
sentado bajo la superficie

jugaba con las algas,
pero yo no veía nada, sin cesar: cairo, cairo,
y entonces salió del agua,
para que creyéramos que se había burlado de la muerte,

pero no de la carne ni de la sangre, si es que vivió una vez.

Fotogramas de Tarde para morir joven de Dominga Sotomayor; El verano de los peces voladores de Marcela Said; fotografía de Juan Millas.

o tym, co utraciliśmy

a później w nocy przypomniałem sobie,
jak kiedyś było z nami, kiedy wołałaś przez sen – kair, kair,
ale ja ciebie nie słyszałem wcale,

a nasze ręce poprzez drżenie trawy
nie przedarły się nigdy. i był bóg,
czułem jego obecność w jeziorze,
siedział pod powierzchnią

i bawił się wodorostami,
ale nic nie widziałem, ciągle – kair, kair,
i wtedy wyszedł z wody,
abyśmy uwierzyli, że zakpił ze śmierci,

ale nie z krwi i ciała, jeżeli sam żył

z tomiku Żal, może on (2022)

Rafał Wojaczek

1945-1971, Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

ELLA DICE QUE EL AMOR LE DUELE

Ella dice que el amor le duele
esta flor negra
que crece en su densa cabeza

La flor que aprieta
pues los ojos son con esfuerzo

En su mirada está la zarza
que se enciende en mí

22/23 IV 1966

Fotografía de Paul Haviland (1880-1950)

ONA MÓWI, ŻE JĄ MIŁOŚĆ BOLI

Ona mówi że ją miłość boli
ten czarny kwiat
co rośnie w zwięzłej głowie

Kwiat co uciska
więc są oczy z wysiłkiem

Ona patrzy krzakiem
który się we mnie zapala

22/23 IV 1966

Adam Górski

1976 – , Polonia (Cracovia)

Trad. Ada Trzeciakowska

***

La memoria es un árbol invertido
de oraciones, en cuya mente las manzanas (piedras)
filtran el cielo a manos apretadas, y las huellas
preceden a los pasos del suelo.

De Anotaciones a miradas apartadas (2022)

Fotografías de Jerry Uelsmann (1934-2022, EE.UU); fotograma de La infancia de Iván de Andréi Tarkovski

***

Pamięć to odwrócone drzewo
modlitwy, w którego umyśle jabłka (kamienie)
przemycają niebo do ściśniętych rąk, a ślady
poprzedzają kroki ziemi.

Z tomiku Notatki do odwróconych spojrzeń (2022)

Janusz Pasierb

1929-1993, Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

VÍA CRUCIS

no es de extrañar
que cada dos por tres caiga

no hay un solo momento
sin que nos lleve a cuestas

a veces alguien rompe a llorar
entonces se le hace aún más duro

le limpia la cara con un trozo de tela
mira con espanto la imagen reflejada

a veces sostiene su cruz
está menos solo en su suplicio

de repente grita a su lado
ahoga por un instante la pulsación de la sangre

a su lado cruces similares
muere entre otros

entre buenos y malos
como cada uno de nosotros tendido

Del reportaje de Lys Arango, Barán, Rajastán, el día en que la población de la India ha superado a la de China

DROGA KRZYŻOWA

nic dziwnego
że co chwilę upada

nie ma chwili
żeby nas nie dźwigał

czasem ktoś się rozpłacze
jest wtedy jeszcze ciężej

chustą twarz obetrze
patrzy ze zgrozą w odbicie

czasem krzyż podeprze
jest mniej samotny w męce

raptem zakrzyknie obok
zagłuszy na chwilę pulsowanie krwi

obok podobne krzyże
umiera między innymi

pomiędzy dobrym i złym
jak każdy z nas rozpięty

Krzysztof Karasek

1937 – , Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

Callando

El que habla
es el que calla.
O:
«Pero sobre lo más importante,
prefiero callar». (Rilke)

Estaba recostado contra el reposabrazos del sillón
cuando el rayo de una estrella lejana
perforó su pupila.

Fue en otro país, en otro sueño.
Un pañuelo de seda
que envolvía su cuello
se deslizó hasta las rodillas de ella.

Como la vía láctea. Las sombras
se alargaban, caía la tarde,
el sol estaba sangrando,
mientras ellos permanecían en el abrazo de la bahía
como en un frasco de miel.

Dos mares
derramados en torno a sus caras, península de pasión,
óvalos de ternura. Todo
se iba convirtiendo en la trama de una canción inaudible
reflejada en la luz de las montañas.

Ya que debemos hablar de lo más importante,
debemos callar, dijo.
El que calla
es el que habla.

Imagen de Qistina Khalida

MILCZENIE


Kto mówi
ten milczy.
Albo:
„A o tym, co najważniejsze,
zmilczę”. (Rilke)

Siedział oparty o poręcz fotela
kiedy promień dalekiej gwiazdy
przewiercił mu źrenicę.

To było w innym kraju, w innym śnie.
Jedwabny szalik
owinięty wokół szyi
zsunął się do jej kolan.

Jak mleczna droga. Cienie
wydłużały się, zapadał wieczór,
krwawiło słońce,
a oni trwali w uścisku zatoki
jak w słoju miodu.

Dwa morza
rozlane wokół twarzy, półwysep namiętności,
owale czułości. Wszystko
stawało się wątkiem niesłyszalnej pieśni
odbitej w świetle gór.

Skoro musimy mówić o tym, co najważniejsze,
musimy milczeć, powiedział.
Kto milczy
ten mówi.



Zbigniew Herbert

1924-1998, Polonia

Trad. Xaverio Ballester

DON COGITO Y EL MOVIMIENTO DE LAS IDEAS

Las ideas van y vienen a la cabeza
dice la expresión coloquial
la expresión coloquial
sobrevalora el movimiento de las ideas
la mayoría de ellas
se mantiene inmóvil
en el centro de un aburrido paisaje
de grises cerros
de árboles resecos
a veces se acercan
hasta el impetuoso río de las ideas ajenas
pero permanecen en la orilla
sobre una sola pierna
como garzas famélicas
entristecidas
hacen remembranza de los manantiales secos
dan vueltas en círculo
buscando granos
no van y vienen
ya que no llegan
no van y vienen
ya que no saben adonde
se sientan en una piedra
bajan los brazos
bajo el nublado
y cercano
cielo
del cráneo

La última foto es e autorretrato de André Kertész

PAN COGITO A RUCH MYŚLI

Myśli chodzą po głowie
mówi wyrażenie potoczne
wyrażenie potoczne
przecenia ruch myśli
większość z nich
stoi nieruchomo
pośrodku nudnego krajobrazu
szarych pagórków
wyschłych drzew
czasem dochodzą
do rwącej rzeki cudzych myśli
stają na brzegu
na jednej nodze
jak głodne czaple
ze smutkiem
wspominają wyschłe źródła
kręcą się w kółko
w poszukiwaniu ziaren
nie chodzą
bo nie zajdą
nie chodzą
bo nie ma dokąd
siedzą na kamieniu
załamują ręce
pod chmurnym
niskim
niebem
czaszki

Adam Górski

1976 – , Polonia (Cracovia)

Trad. Ada Trzeciakowska

***

En la mesa de la cocina un pequeño vaso de medicina su revelación
las ramas brotan de tu amor
nacen del aire
plantadas dentro
echados los dulces dados de las cosas.
las hemos perdido
como el habla el oído la memoria el jardín el silencio
que no responde.

De Anotaciones a miradas apartadas (2022)

Fotografías de Josef Sudek

***

Na stole w kuchni mały kubek po lekach jego objawienie
gałęzie wyrastają z twojej miłości
tworzą się z powietrza
zasadzone w środku
rzucone słodkie kości rzeczy.
Straciliśmy je
jak mowę słuch pamięć ogród ciszę
która nie odpowiada.

Z tomiku Notatki do odwróconych spojrzeń (2022)

Karol Maliszewski

1960 – , Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

Al Borde (en la orilla)

Insectos palo al borde de un gran
vidrio. La llave suena y no atina.
Las flores asoman las cabezas
de las macetas. En la mesa restos de ratafía.

Como en cuadros de los viejos maestros.
Sólo falta mover la copa de la campanilla.
Doblar la luz. Pero no las manos.
Una gran nada, sacada de la filosofía,

no se corresponde con el cálido interior.
Los que se han ido se han dejado a sí mismos
en fotografías, cabellos sobre toallas.
Hormigas en una isla desierta (el pan)

proclaman algo, callando, en una lengua ajena.
Así quedarse quieto al borde de la imagen,
girar la llave en la mano, mover la tierra;
los vecinos se han marchado por la noche

y ya deben de abordar Inglaterra.
Vencido por insomnio e impotencia
cierro bien los grifos, bajo las persianas.
Nuestra calle se va quedando desierta.

Fotos propias

Na brzegu

Patyczaki na brzegu wielkiej
szyby. Klucz dzwoni i nie trafia.
Kwiaty wychylają głowy
z donic. Na stole niedopita ratafia.

Wszystko jak u starych mistrzów.
Tylko kielich poprawić dzwonkowi.
Załamać światło. Ale nie ręce.
Wielkie nic, wzięte z filozofii,

nie pasuje do ciepłego wnętrza.
Wyjeżdżający zostawili siebie
na fotografiach, włosach na ręczniku.
Mrówki na bezludnej wyspie (chlebie)

coś, milcząc, głoszą w nieznanym języku.
Tak stawać cicho na brzegu obrazu,
klucz w ręce obracać, ziemię poruszać;
sąsiedzi wyjechali w nocy

i pewnie już są u brzegów Anglii.
Z bezsenności i niemocy
zamykam okna, dokręcam krany.
Nasza ulica się wyludnia.

Krzysztof Karasek

1937 – , Polonia

El día de su cumpleaños

Trad. Ada Trzeciakowska

pájaros

Pájaros de sangre se posaron en mis manos
los llevaba delante de mí bulliciosos y trémulos
instalados en los nidos de mis manos los llenaban hasta el borde
Pastaban deprisa
ávidos
adivinando el amor
Cuando llegaste te los enseñé
pájaros blancos
pendiendo inertes
del rojo que cubrió sus cuerpos
Lo comprendiste
Liberaste el blanco
y sacudiendo el rojo dijiste
Largoooooooooooooooo

Imágenes de Laura Makabresku (Kamila Kansy, 1987, Polonia)

Ptaki

Ptaki krwi usiadły mi na rękach
niosłem je przed sobą zgiełkliwe rozedrgane
siedziały w gniazdach dłoni wypełniały je po brzegi
Pasły się szybko
Zachłanne
odgadywały miłość
Kiedy przyszłaś pokazałem ci je
białe ptaki
zwisające i bezwładne
od czerwieni która je obsiadła
Zrozumiałaś
Uwolniłaś białe
i strząsając czerwień powiedziałaś:
Siooooooooooooooooo



Jacek Napiórkowski

1966, Polonia

***

Me has admitido en tu púrpura.
Un labio -verano-, el otro -otoño-.
Ventanas rotas en la catedral de la noche –
tus blasfemias y las mías.
Succionábamos el mar.
Cuando azotaba la lluvia, cuando ardía la niebla,
y los tejados esperaban el fin del mundo.
Me marcaste con palabras de amor,
Aún las tengo en la espalda, marcas
de tus dientes y alas.

Tłum. Ada Trzeciakowska

***

Dopuściłaś mnie do swojej purpury.
Jedna warga – lato, druga warga – jesień.
Powybijane okna w katedrze nocy –
twoje i moje bluźnierstwa.
Ssaliśmy morze.
Kiedy zacinał deszcz, kiedy paliła mgła,
a dachy czekał)’ na koniec świata.
Naznaczyłaś mnie słowem miłości,
mam je wciąż na plecach, ślady
twoich skrzydeł i zębów.

Dariusz Suska

1968 – , Polonia

Trad. Ada Trzeciakowska

invierno

Recuerda el invierno: carboneros caían como carámbanos
sus cuerpos se rompían en mil piezas
se quebraban sus plumas de cristal sentíamos que el sol
era una casualidad tal vez graznábamos muerta 
está la materia clara y la oscura al contrario
queríamos que se apiadara de los pájaros carpinteros
muertos que se apretaron contra el espino prunifolio:
 
¿vas a decir algo sobre el tiempo una palabra al menos?
 
o recuerda la muerte en invierno: la primera vez en enero
cuando nos perdimos en la nieve negra y purísima
muertos navegábamos en témpanos en trineos
de dos en dos de tres en tres de una orilla sin orilla
pienso en ello todos los días porque tal vez sea Dios
la materia oscura y tal vez sea bueno lo que supondría
una cosa más preciosa en el mundo: ¿brincos de elefantillos?  
 
dime algo sobre el tiempo di una palabra al menos
 
o recuerda la noche en verano: lo escasa que parecía
junto a hogueras que acerezadas se estaban extinguiendo
alrededor del alba que amanecía blanquecina
cuando espoleaba el látigo de los días vividos contigo 
no entiendo nada de ellos -ni la vida ni la muerte
con más exactitud: la vidamuerte la inmateria de las horas-
si tú las entiendes conocerás la impotencia de los poemas:
 
¿vas a decir algo sobre el tiempo una palabra buena al menos?

de «100 poemas de Ucrania y Polonia» (Instituto de Literatura de Polonia y Editorial Austeria, 2022)

Fotografías de Arno Rafael Minkkinen

Dzień po świętach

Przypomnij zimę: sikorki spadały jak sople
na tysiąc kawałków tłukły się ich ciałka
szklane pióra pękały czuliśmy że słońce
może być przypadkiem krakaliśmy martwa
jest jasna materia ta ciemna na odwrót
chcieliśmy żeby współczuła zamarłym dzięciołom
które się wtuliły w śliwolistny głóg –
 
powiesz coś o czasie zdradzisz chociaż słowo?
 
lub przypomnij śmierć w zimie: pierwszy w styczniu raz
gdy się zgubiliśmy w czystym czarnym śniegu
zmarli płynęliśmy na sankach na krach
we dwójkę we trójkę do brzegu bez brzegów
myślę o tym codziennie bo może jest Bogiem
ciemna materia i dobrym to by oznaczało
coś ładnego w świecie – błotne harce słoniąt?
 
zdradź mi coś o czasie powiedz jedno słowo
 
lub przypomnij noc latem: jak było jej mało
przy ogniskach które gasły na wiśniowo
naokoło świtu wschodzącego biało
gdy szło w ruch wędzisko dni przeżytych z tobą
nic z nich nie rozumiem – życia ani śmierci
ściślej: życiaśmierci niematerii godzin
jeśli ty rozumiesz znasz bezradność wierszy –
 
powiesz coś o czasie jedno dobre słowo?